Reseña: Se mía y te daré el mundo - Paula R. F.

¡Olímpicos buenos días, feliz inicio de semana!

¿Qué tal han estado? Yo últimamente he sido presa de las migrañas y no he podido controlarlas. Precisamente eso, hizo que me retrasará en publicar la reseña, y pido perdón a la autora, que muy querida, nos envió copia a nuestro Kindle para la reseña, ¡gracias por confiar en nuestro equipo!

 El día de hoy, vengo con un libro que es novedad literaria. Y del que tengo muchas cosas que decir, primero, aunque no suelen atraerme las portadas de este tipo, ésta se me hizo curiosa por lo que ya tenía un punto a su favor. La sinopsis si es algo que me hizo decir “Se lee interesante”

Les dejo por aquí la sinopsis.

Hans siempre tuvo muy claros sus sentimientos de Dominante y junto a su amigo
Leandro recorrió, años atrás, los locales de un submundo lleno de magia y misterio, y llenó sus noches y sus días con juegos y prácticas no alcanzables a la mayoría de los mortales.
Pero su vida sufre un serio revés y queda a cargo de Ivy, una adolescente de catorce años, huérfana de unos queridos amigos suyos, muertos de forma en un accidente de tráfico.
Hans está demasiado ocupado con sus negocios, además de colaborar activamente con un grupo policiaco contra la trata de personas, como para asumir la tutela a tiempo completo de Ivy, y la envía a un internado suizo para que crezca con las mejores comodidades. A medida que Ivy crece, Hans decide ser lo más discreto posible con su vida alternativa. Y nace una amistosa camaradería entre su tutelada y él.
Pero…
Ivy se está convirtiendo en una joven mujer muy atractiva, demasiado atrayente, incluso, para su tutor.
Él intenta sustraerse a la poderosa atracción que nace en su interior y se aleja de ella, de ese deseo prohibido, aunque demasiado tarde descubre que Ivy está decidida seducirlo.
¿Podrá Ivy derribar las barreras que Hans interpone entre ellos?
¿Impedirá Hans que el ardiente anhelo que lo desgarra le haga perder el control?
El destino es caprichoso y puede que ninguno pueda decidir sobre lo que ya está escrito en el futuro.

Cuando leí el libro no pude evitar realizar una comparación con una especie de montaña rusa, y es que tiene momentos muy buenos, pero algunos diálogos me bajaban el ánimo cada cierto capítulo, hasta que la narración volvía a atraparme y no me soltaba, y eso me agradó muchísimo. Me gustó mucho, el trasfondo de la historia, te mantiene allí, la personalidad de nuestros protagonistas y todo lo que atraviesan es de entenderse, solo que me parece que por momentos, tenían un despliegue de ellos mismos que me preocupaba y luego me divertía (Creo que estoy enloqueciendo).

El libro inicia con Hans, nuestro protagonista en una escena bastante fuerte y quizás no apta para todo público, cuando recibe una noticia desgarradora que hasta a mí me dolió, su vida cambia en un giro de 180 grados a partir de ser momento, ya que pasa de ser solo responsable y veedor de sí mismo, para serlo de una adolescente que quedó a su cargo sin familia que la acompañe en una etapa de su vida, por la que nadie debería pasar y menos por partida doble.
Hans, como la gran persona que es llena de moral y principios, que todo un Barón de su talla debería ser, se compromete día y noche a velar por lo que mejor sea para Ivy.

Por otro lado, tenemos a nuestra protagonista, una chica que vemos crecer y padecer por poco más de un año consecutivo pesadillas de culpabilidad por seguir con vida y sus padres no.

Teme estar sola y es lo que a mi parecer refuerza toda esa atracción que desde que conoce a Hans siendo apenas una niña y teniendo ilusiones infantiles, poco a poco aumentando a medida que crece y tienen mayor convivencia.

Amé la historia que tiene el libro en segundo plano, y es que lo que puedo ver, es que la autora investigó y se asesoró en los temas que trata la historia. Es decir, sobre la trata de personas y los distintos crímenes que ocurren a diario y por lo que muchos guardan silencio absoluto, debido a que en su comunidad son temas tabúes. Sin importar que ellos sufran una eternidad y los criminales gocen de su libertinaje absoluto, vanagloriándose de los crímenes cometidos.

Amé, el hecho que hoy por hoy, puedo decir que conozco nuevas cosas del mundo y personajes de importancia, gracias a Hans, y su conocimiento, ¡AMO ESO! Es para mí algo mágico cuando aprendo cosas a través de los libros y no solo palabras. Agradezco eso a Paula, y es que mi vocabulario creció tras esta lectura.

Puedo decir que cuando inicié el libro, dudé y hasta gran parte de él, de que me gustara debido a que no compaginaba, sobretodo en tiempos, donde mi cabeza está en otros mundos.

Una cosa que no me gustó, debido a que me dejaba perdida, es que cuando se presenta cambio de narrador, no me dice quién es, y por momentos, aunque pocos y fugaces. Quedaba en una especie de limbo hasta que en los diálogos o alguna palabra en medio de pensamientos me decía quién era la persona que me transmitía o estaba hablando.

No quiero hablar de más, y solo diré; lean el libro, y me place decir que no es de esos libros eróticos que te encuentras cada dos por tres, que es un libro cargado de sensualidad sin llegar a cansarte o incluso a fastidiarte. Que la historia secundaria, es muy buena y te mantiene en un completo querer terminar de leer, para poder saber cuál es la conclusión del libro. Y es por ello que le doy 4 búhos.