Reseña: Antípodas - Grace Lloper(+18)

¡Hola, todo el mundo! ¿Cómo los está tratando la cuarentena? Yo estoy habituada a estar en casa, a menos de que sea totalmente necesario salir, así que podría decirse que he estado entrenando toda mi vida para este momento XD. Les envió mucha fuerza a aquellos que en este momento se sienten desesperados por el confinamiento obligatorio. Mientras trabajemos juntos saldremos de esta. Mantengan la esperanza.

En fin, estoy muy emocionada por hablarles de este hermoso libro. Tuve la fortuna de conversar un poco con la autora y me quede impresionada al saber que ha escrito­ dieciséis libros incluyendo este; en su haber tiene libros como la serie «Santuario de colores», cuyos títulos independientes son «Dibújame» y «Píntame», además de «Cántame», «Aguas claras», «Aguas turbias», «Aguas mixtas», entre otros. A continuación, les dejo sinopsis y ficha técnica del libro que tuve el honor de leer. Ustedes sigan bajando porque les voy a contar todo lo que pueda sobre esta historia.

Ah, una cosa más, si son menores de edad, más les vale alejarse de esta historia. No quiero ser culpada de corromper almas XD.

Dichoso el que resiste la tentación porque, al salir aprobado, recibirá la corona de la vida que Dios ha prometido a quienes lo aman. |Santiago 1:12|

A Mikayla Durant poco y nada le importaban esos pasajes bíblicos. Era una buena mujer sin duda alguna, pero a su manera… más espiritual que religiosa. Llegó a Bar Harbor huyendo de su pasado y se encontró con un presente que le gustaba. De a poco fue recibida en la pequeña comunidad como una más y fue ganándose el corazón de sus miembros.

Sobre todo, de uno en especial.

Bruce Hagerty era un pilar en la comunidad, dueño de una fábrica de plásticos que daba trabajo a la mitad de la población. Un honorable viudo con tres hijos a quien todos respetaban. Pero había más en él que solo un hombre con mucha visión, era un líder. Y paradójicamente, para él liderar significaba «servir». Servir de una forma muy especial.

La atracción entre ellos era evidente y palpable.

Pero… eran tan diferentes como el día y la noche. Dicen que los polos opuestos se atraen, la pregunta entonces es: ¿Podrán dos personas tan distintas tener un futuro en común?

Un pasaje de la Biblia dice: ¿Puede alguien caminar sobre las brasas sin quemarse los pies? |Proverbios 6:28|

¿Están dispuestos a descubrirlo?

Cuando se lee un libro como este, lo peor que puede hacerse es iniciar la lectura con un montón de prejuicios e ideas preconcebidas. Parece un requisito obligatorio que los protagonistas cumplan con una serie de requisitos que, si bien no están especificados en ninguna parte, han creado unos parámetros para las historias de cualquier género en los últimos tiempos. No digo que todas y cada una de las historias escritas en la actualidad siguen este manual no estipulado, pero la mayoría coinciden en aspectos como edad o estado civil. Esta novela se sale por completo de todos esos factores rígidos y nos presenta una historia refrescante, innovadora y única, que mantiene al lector enganchado de principio a fin. Me alegra decir que, al iniciar la lectura de este libro, decidí hacer a un lado mis expectativas para leerlo con mente abierta y apreciar en su totalidad la trama, y por fortuna, no me arrepiento de mi decisión.

«Antípodas» cuenta la historia de Mikayla, una mujer agnóstica, recién separada, con dos hijos y con muchos sueños por cumplir, quien lucha por recuperar la independencia que no ha tenido después de veinte años de vivir bajo el yugo de un esposo infiel y desgraciado, y de Bruce, pastor anglicano, viudo y padre de tres, quien por casi diez años se ha dedicado por entero a su congregación. Ambos no tienen nada en común, pero la pasión entre ellos despertará las brasas que terminarán por reducir a cenizas todos los impedimentos que se atraviesen en su camino en la búsqueda del final feliz. Su historia de amor no es una llena de corazones y flores, al menos no toda ella lo es, por el contrario, cada vez que parecen haber superado un obstáculo, uno mayor y más complejo toma el lugar del anterior, y aunque sus sentimientos  no hacen más que crecer cada día, parece mucho más sencillo negarse a ese amor que luchar con uñas y dientes por un imposible.

Las creencias de ambos juegan un papel importante en su relación. Por un lado tenemos a Bruce y su certeza de que Dios ejerce un poder infinito en todo lo que nos rodea, que sus enseñanzas nos guían a través de cada momento de nuestras vidas y que la fe en Él nos llena de regocijo. Del otro lado de esta encrucijada tenemos a Mika y su escepticismo hacia las creencias de Bruce, y aunque respeta su fe, hay momentos en los que se siente acorralada por su fervor y eso la hacen sentirse desde agobiada hasta recelosa. Además, Mika y Bruce no solo luchan contra sus diferencias, también deben enfrentarse a los demonios internos y externos que acompañan a nuestra protagonista y le impiden creer en lo que ellos tratan de construir juntos. Ya saben lo que dicen, “De eso tan bueno no dan tanto”.

Ambientada en los fríos parajes de Bar Harbor en Maine, «Antípodas» es una novela que habla del amor, de la familia, de la amistad, de la fe; habla del compromiso con los otros y con nuestras convicciones, habla del respeto, de la paciencia, de la entrega en cuerpo y alma, pero lo más importante, habla de que para cada roto hay un descocido y que no es necesario dejar de ser quien eres para agradar a los demás. «Antípodas» es un libro escrito para creyentes o agnósticos, para santos o pecadores, o simplemente, es un libro escrito de un ser humano a otro, sin etiquetas o ideas preconcebidas. Solo es un relato diseñado para hacerte sentir.

Y sí, sé que ustedes deben estar preguntándose, ¿Cómo una relación, que en apariencia tiene todo en contra, puede llegar a convertirse en un final feliz? Bueno, van a tener que leerlo para averiguarlo.

LO BUENO

Sinceramente no sé por dónde empezar, pues este libro tiene muchas cosas geniales en él. Hablemos en primer lugar de la trama, que en mi caso fue lo que selló el trato indiscutiblemente. Normalmente cuando leemos un libro donde los protagonistas toman posturas opuestas en un mismo tema, es común que al llegar al clímax de la historia, uno de ellos ceda ante las creencias o preferencias del otro. Creo que, de haber empezado a leer el libro imaginando uno u otro escenario, habría esperado que eso pasará y el final habría resultado ser indefinido para mí, sin embargo nada de eso pasó, por lo que hasta la última palabra estuve al borde de comerme las uñas y quedé muy feliz y conforme con el final que consiguieron mis protagonistas. En segundo lugar están los valores que directa o indirectamente la autora logró proyectar en la historia, como el respeto y la amistad que mencioné previamente, además de que los personajes están tan bien estructurados que podrían ser cualquier persona, como ustedes o yo, y permite al lector identificarse con las situaciones ahí narradas. En tercer lugar tenemos la escritura del libro; no sé si a ustedes les pasa, pero yo detesto los libros con tantos modismos, de esos en los que te pierdes tres de cada diez cosas que el autor quiere decir. Resalto demasiado este aspecto, además de la buena ortografía y gramática, lo que me permitió leer el libro con fluidez, sin estar releyendo cada dos o tres frases para poder entender de qué están hablando. Otra cosa que me gustaría resaltar es el espacio/tiempo en que se narra la historia, pues a medida que nuestros protagonistas se van enamorando, el tiempo va transcurriendo, y no es como en esas novelas donde todo ocurre en una semana y los problemas se solucionan como por arte de magia. Este libro es sobre personas ficticias pero reales, y eso me encantó.

«Me quedó claro el motivo por el cual dejó de besarme. Era el hijo de un pastor anglicano, estaba lleno de preconceptos y normas estrictas. Tendría que seguirle el juego o no conseguiría nada de él. Bien, me acoplaría a su ritmo, no me quedaba otra, pero no tenía por qué soportar su ridícula charla. Él podía creer lo que quisiera, yo lo respetaba, pero que respetara también mis propias creencias.»

« –¿Pides por mí?

—Rezo por ti todo el tiempo —aseguró.

—¿Y qué pides? —pregunté anonadada.

—Que encuentres lo que estás buscando, que encuentres la felicidad… y aunque no lo pida, espero que esa felicidad sea conmigo.»

LO NO TAN BUENO

Los temores de Mikayla. Sí, lo entiendo, acaba de salir de una relación traumática y necesita tiempo para encontrarse a sí misma. También comprendo que es imposible no desconfiar cuando todo lo que se conoce son engaños y subterfugios, pero, ¡Por favor! Bruce es de los que no se ven. El pobre hombre le puso su corazón remendado en las manos con las esperanza de que ella lo recibiera, y cuando sus miedos fueron más grandes que el amor, él estuvo ahí pacientemente para ayudarla a superarlos, ¿Cómo haces a un lado una y otra vez a un hombre que lo único que quiere es ser feliz contigo, a pesar de todo y de todos? Juro que llegué a odiarla por eso.

«Tengo miedo, Bruce… —sollocé apoyando mi frente en su pecho desnudo— miedo de no ser suficiente para ti. Miedo de que nuestras diferencias nos separen cuando te ame tanto que no pueda soportar vivir sin ti.»

«¿Acaso mi propia, involuntaria e incontenible atracción hacia él estaba envuelta solo en deseo? ¿Era su atracción una señal de que con él podría, si así lo decidía, explorar por fin los escurridizos acertijos del amor»

LO SANTO

Bruce Hagerty. Ese hombre es un maldito santo. No tengamos en cuenta el hecho de que le ha guardado luto a su esposa por casi diez años, o que se desvive ayudando a su comunidad, ni siquiera tomemos en consideración que es un padre abnegado y un hombre lleno de más virtudes que fallos. No, solo consideremos el amor, la paciencia, el compromiso y la total entrega hacia Mika y, no solo tendremos a un santo, sino al hombre por el que más de una se lanzaría a las llamas ardientes del infierno con los ojos bien abiertos y sin hacer una sola mueca.

«Mi corazón sufrió por tanto tiempo desde ese día que dejé de oírlo, y solo escuchaba lo que mi cabeza me decía que era correcto. Yo solo... solo espero que no sea demasiado tarde para volver a escuchar otra vez... a mi corazón.»

«No juzgues mis sentimientos en base a los tuyos, yo llevo meses conociéndote. Necesité una sola mirada para saber que eras mi destino. Mikayla, quizás tú me hayas conocido hace tres semanas… pero yo llevo sabiendo de ti desde el primer día que pisaste esta ciudad y alquilaste esta cabaña.»

Ya para terminar, quiero dar las gracias a la autora por permitirme enamorarme de la historia de Mika y Bruce. Grace, sé que pudiste escoger entre todos los dioses en nuestras filas para leerte, y estoy segura de que cualquiera de los otros habría hecho un trabajo genial al reseñarte, porque esta historia te lo brinda todo para hablar maravillas sobre ella, pero espero que esta sincera opinión sirva como pago por la confianza que pusiste en mí. También sé que conté con suerte al contestar tu mensaje, pero igual te estoy agradecida por bridarnos a El Olimpo Entre Libros y a mí, la oportunidad de leerte. Fue un gusto hacerlo y espero volver a tener el honor más adelante, en especial con cierta historia cuyo abrebocas podemos encontrar al final de esta.

Imposible darle menos que un cinco. Si pudiera darle más, no duden ni un instante que lo haría. Y si se preguntan el porqué, les sugiero releer la reseña XD.

No se olviden de pasar por YouTube para ver el hermoso booktrailer cortesía de Eros, de inmediato vayan a Wattpad para que lean todas las frases de esta lectura, y si les queda tiempo, vayan a echar un vistazo a Pinterest para que vean el tablero con todas esas estupendas imágenes.

Ahora sí, me despido. No olviden hacer caso a las recomendaciones sanitarias y cuidarse mucho. Los quiero a todos bien y a salvo.

Nos vemos en otra ocasión, tras el velo de la oscuridad.