Reseña: El Aire Que Respira - Brittainy C.Cherry

 

¡Hola, gente bella del Olimpo! Estoy feliz de compartir mi primera reseña con ustedes como Poseidón. Esta nueva entrada en el blog viene de la mano de «Leamos: Club literario», nuestro perfil de amantes a las lecturas conjuntas que modera los grupos en los que hemos tenido el placer de leer de manera libre y con géneros variados.

Hoy les traigo esta reseña de «El Aire Que Respira» de la autora Brittainy C.Cherry, una historia que en lo personal amo y moría por tenerla en esta página.

Sin más que agregar, ¡Iniciemos con la reseña!

 

¿Es posible volver a respirar tras haberlo perdido todo?

Tristán ha perdido a su mujer y a su hijo.
Elizabeth ha perdido a su marido.
Son dos almas heridas que luchan por sobrevivir.
Necesitan recordar lo que se siente al querer.
Solo así podrán volver a respirar.

 

     

«Para siempre es un tiempo mucho más breve de lo que la gente piensa».

 

 

¿Qué harías si un inesperado momento lo cambia todo en tu vida?

Tras tener una vida feliz con todo lo que uno puede desear tener, Elizabeth y Tristán pasan por un momento en sus vidas que cambia su destino. Ambos personajes pierden a la persona que amaban, dejándolos rotos y sin esperanza. Dos seres con diferentes maneras de ver el dolor, pero con un mismo sentir tras la pérdida.

Dos seres que no encuentran el equilibrio ni el sentido a la vida.

 

Comenzaré hablando de Tristán, uno de los personajes masculinos que se han convertido en parte de mi lista de favoritos. Un hombre que tras perder a las personas que más ama se vuelve frio, ausente de emoción y adicto al dolor. Al inicio nos muestra algo muy distinto en él, pero al sufrir aquella pérdida la oscuridad y la soledad se hacen sus más leales compañías. Al alejarse del  mundo y las personas, piensa que ha hecho lo mejor, pues cree que hace daño a cada persona que puede rodearle. Sin embargo, su nueva vecina le hace sentir cosas que jamás imaginó volver a sentir, y descubre que tienen más en común de lo que piensa, pues ella logra entender su dolor más que cualquiera que haya estado cerca de él.

Debo decir que solo colocó en su corazón un caparazón duro, pero que en realidad es un hombre con miedos y miles de virtudes.

 

 

«Uno siempre debe aferrarse a las cosas que le hacen feliz».

 

Elizabeth es un personaje con el que logré empatizar demasiado; tanto como pensaba, como su sentir o en lo que era capaz de creer. Al perder al amor de su vida se derrumbó por completo, pero ella tuvo algo porque luchar y esa fue su pequeña Emma. Este personaje vivió el duelo como creo todos los que hemos perdido a un ser querido lo hace, con la diferencia en que ella aún tenía esperanza en la vida. Una mujer que no se dejó llevar por los típicos chismes de pueblo tras conocer a su vecino y vio en él su reflejo lleno de dolor y la falta de amor que ambos necesitaban.

Y no pudo permanecer apartada de él por más que sabía debía hacerlo.

Emma, esa pequeña me robó el corazón, se comportaba de una manera inteligente y madura, y en varias ocasiones me hizo reír con la inocencia que un niño de su edad posee.

 

«Lloré con rabia, gemía y sollozaba tratando de apagar la pena espesa, salvaje e indescriptible, como un animal Todo me dolía. Todo estaba roto.».

                                   

 

Hay algo que me costó mucho entender en este libro, y fue el utilizarse para volver a sentir algo que estaba ya perdido. Creo que jamás se puede remplazar el amor o el deseo de que alguien te brinde, y eso fue lo que estos personajes creyeron que les haría bien, claro está, que no se esperaban todo el caos que les causaría. Hubo culpa, rechazo, más dolor y negación por los sentimientos que creyeron estaban muertos. Debo decir que me encantó la forma en que fluyó su historia, no fue tan forzada ni dañina, ambos sabían que no estaban en lo correcto y se alejaron, pero el amor les puso a prueba.

Tengo una total envidia al saber que después de amar y ser amados, se les presentó la posibilidad de volver a encontrar el amor, lo que pocos humanos o dioses, como nosotros, hemos tenido. ¡Qué envidia!

 

 

«La forma en que veía claramente lo profundo de mi herida, más allá de la superficie, era increíble.»

 

 

Si algo amo de las historias (aparte del romance, claro está) es saber sobre los personajes secundarios. En esta el personaje de Faye me enamoró por completo, era divertida, espontánea y fiel amiga. Hizo que del drama que la historia desarrollaba también existiera ese momento divertido, con instantes que te hacían reír a carcajada y darle a la trama ese toque distinto, no tanta lágrima y corazón estrujado. Sin duda disfruté mucho leer sobre ella y esas pequeñas aventuras que tenía o el lenguaje tan libre que ofrecía.

Otro personaje que me gustó fue el señor Henso, creo que vino a aportar esa sabiduría que todo personaje debería tener. Llenó de muchas palabras sabias a Tristán. Su historia y todo lo que le envolvía me encantaron.

Tanner, por otra parte, fue un personaje que odié. Saber lo ruin y despiadado que era me dio escalofríos. Esa obsesión que tenía con Elizabeth le hizo hacer cosas sumamente enfermizas, no podía creer lo mal de la cabeza que estaba. Pero la autora supo plasmar a un buen villano.

 

«Eran dos alientos enviando aire a los pulmones del otro, evitando que cayéramos en los principios de nuestra propia oscuridad.».

 

 

Mi Reacción: Esta historia fue una recomendación de lectura y no puedo negar que ha sido maravilloso conocer la pluma de la autora, me envolvió totalmente en la trama y sin duda se ha convertido en una de mis favoritas. Amo como desarrolló cada detalle sin dejar escapar nada. Amo absolutamente toda la serie.

 

Mi puntuación es: 5/5

 

No olviden pasar por nuestras redes y ver el especial que hay en ellas de esta historia. En Wattpad y Pinterest encontrarán frases y edits. Les invito a comentar si ya han leído la historia porque nos encantaría conocer sus impresiones.

Sin más que decir, me despido.

Nos leemos la próxima vez con una nueva reseña.