Amor a primera vista ¿Mito o realidad?

¡Hola, Olímpicos! Espero que todos estén pasando el último mes del año de forma fantástica. Es un placer para mi poder llegar a ustedes esta última vez antes de que el año culmine y estoy muy anhelante por saber lo que nos depara el 2020… Llámenme optimista, pero tengo un buen presentimiento sobre lo que nos trae el próximo año, así que estoy ansiosa por vivirlo. Dejando a un lado todas las buenas vibras para lo que ha de venir, entremos en materia.

Bien, como ya vieron en el título de esta entrada, hablaremos sobre el amor a primera vista y si es o no un mito en el que algunos estamos deseosos de creer, y es que no solo es el eje central algunos de los grandes éxitos cinematográficos de todos los tiempos o la inspiración de unos cuantos clásicos literarios, el amor a primera vista está presente en las bases de nuestros sentimientos hacia los demás. Como es imposible hablar de amor a primera vista sin saber lo que es el amor, vamos a definirlo:

Según el diccionario de palabras básicas de google (si, necesitaba algo rápido pero efectivo), el amor es «el sentimiento de intensa atracción emocional y sexual hacia una persona con la que se desea compartir una vida en común» lo cual a mi parecer, debe ir un poco más allá puesto que nadie siente ese tipo de atracción sexual por un padre o un hermano, claro, a menos de que tengas algún complejo de Edipo, Electra o algo así, pero no me voy a poner exigente porque como a lo que a nosotros nos interesa es hablar del concepto de amor romántico, este término es aceptable para poder continuar. Entonces podría decirse que, para que exista amor del tipo romántico, uno o ambos de los factores antes mencionados deben estar involucrados, por lo que:

 

Ahora bien, aunque el amor exige un cierto tipo de afinidad entre quienes lo sienten, es necesario interactuar para saber que el sentimiento ha echado raíces, pero ¿Qué hay con el amor a primera vista? ¿Puede sentirse amor hacia otro con tan solo una mirada?

El concepto de amor a primera vista es común en nuestros tiempos, y por lo general, hace referencia al sentimiento que despierta una persona en otra, sin hacer distinción de sexo, raza, ideología, etc., y el cual busca definir el impulso emocional y/o sexual que esta despierta de manera instantánea. Dicho sentimiento puede o no desembocar en algo más profundo, pero esto dependerá de si la persona receptora de las emociones corresponde a ellas. En un sinnúmero de libros de fama mundial, el amor a primera vista es la piedra angular de los relatos, algunos incluso llegan a plasmar el amor a primera vista como algo que raya en la posesividad y la obsesión colmado de altas dosis de lujuria, lo que convierte el escrito en algo que, si bien es llamativo (en especial para los lectores de género femenino) es poco realista. Seamos sinceros, los libros ofrecen mundos alternativos en los que vivir situaciones poco probables y es genial poder disfrutar de una lectura entretenida por muy absurda que esta sea, pero al cerrar la tapa estamos en el mundo real y aquí el amor a primera vista no tiene bases lógicas, si les parece que lo que les digo es demasiado radical, analicemos un caso común en los libros románticos actuales:

Chico conoce a chica y se siente inmediatamente atraído, por lo que decide cortejarla, para lograr aquello, chico la sigue para conocer su rutina y luego fingir un encuentro fortuito que los llevará a la más romántica historia de amor. Chica lo conoce, y al verlo descubre que no necesita nada más porque él tiene todo lo que ella buscaba y más. Se casan, son felices y comen perdices. Fin.

 

 ¡Una gran estupidez!

Si, puede que el comportamiento del chico sea hermoso en el plano literario o incluso en el cinematográfico, y no vamos a mentirnos, en alguna parte oscura de nuestro corazón todos soñamos con ser amados incondicionalmente, pero si un día una persona empezara a seguirnos con la intención de profesarnos su amor, lo mínimo que podemos hacer es correr tan rápido como nos sea posible en dirección contraria. Algunas personas aman la idea del amor y lo usan de excusa para realizar los actos más atroces, por lo que aunque el amor es un sentimiento precioso, no todo lo que se hace en nombre de él lo es. Y si, el amor a primera vista puede funcionar para las princesas de Disney o para un personaje literario, pero en el plano real no es más que un conjunto de reacciones químicas que pueden llegar a ser algo más o morir tan rápido como surgió. 

Por otro lado, la atracción instantánea si es real y es muy común. Podemos sentirnos atraídos inmediatamente por alguien a quien acabamos de conocer sin necesidad de concretar nada, imaginar un millar de escenarios en los que dicha atracción puede conducir a algo más, y por qué no, dar rienda suelta a la lujuria sin mayor objetivo que saciar las ansias, pero eso no convierte tal magnetismo en amor por el simple hecho de llevarlo al plano carnal. Es necesario conocer verdaderamente a una persona, o al menos tanto como sea posible, para que con el tiempo la atracción pueda convertirse en amor, de lo contrario es solo una cuestión de afinidad.

 


    

En conclusión, no, el amor a primera vista no es real, es solo un mito en el que nos empeñamos en creer y que algunos alimentamos a base de libros y películas donde aquellos sentimientos se desarrollan en un plano ficticio donde todo es posible y nada es lo suficientemente difícil como para no tener solución, por el contrario, en el mundo real, la atracción es clave para que surja una relación en la que el amor se construye sobre la base de tiempo y dedicación.

 

¡Nos leemos el 2020! Les deseo una feliz Navidad y un excelente Año Nuevo.

Nos vemos en otra ocasión, tras el velo de la oscuridad.