Reseña: Pequeñas Criaturas - Calabuig y Navarro

 

Buenas, bellezas. 

¿Cómo se encuentran? Espero que muy bien.

Hoy les traigo una reseña del catálogo Wave Silver de la Editorial Wave, titulado «Pequeñas criaturas». 

 

¿Puede alguien ser asesinado delante de un grupo de personas sin que estas ni siquiera se den cuenta de que ha muerto?

En un pueblo costero de Granada, un grupo de amigos pasa sus vacaciones en un pequeño hotel junto a un acantilado. La tarde del 19 de agosto transcurre con normalidad en la piscina hasta que se descubre que uno de los huéspedes, que parecía estar disfrutando de las vistas sobre una tumbona con un sombrero de paja y una revista en el regazo, en realidad está muerto. De inmediato se genera el desconcierto entre los presentes. Jorge Cañamero había sido asesinado delante de todos sin que nadie se diera cuenta y el asesino podía ser cualquiera de ellos.

La inspectora Cayetana Garcés tendrá que averiguar quién cometió el crimen y preparó una pantomima semejante. Sus investigaciones la llevarán a vivir situaciones insólitas y a mezclarse en una trama que combina alcohol, sociedades secretas, científicos excéntricos, posesiones demoníacas, odio y locura. El misterio, la acción y el humor se mezclan en esta historia cuyo hilo conductor es la fuerza imaginativa y la determinación de Cayetana.

 

Recuerdo que allá por el mes diciembre, gracias a la cortesía de esta gran editorial, tuvimos la suerte de ser los primeros en conocer la portada y sinopsis de esta obra.

Sé que más de una de nuestras queridas diosas estaba ansiosa de leerlo, ya que son fieles seguidoras. En mi caso, es mi primera vez con Wave.

No soy asidua a leer novelas policíacas o de suspenso, ya que normalmente me decanto por el cliché. Y además, al leer en la sinopsis la parte de “posesiones demoníacas” me dio un poquito de miedo. Soy demasiado miedosa.

 

El comienzo de esta novela narra en primera persona el sentir de, quien creemos en un primer instante, será nuestro protagonista, por demás excéntrico y de gustos extraños, quien nos cuenta que está pasando sus vacaciones de verano con sus amigos en el hotel rural “El Cortijo de la luna”. Dicho hotel está ubicado en la ladera de la montaña, con el precipicio en uno de sus lados y vista al mar.

Sin dejarnos avanzar muchas páginas, sucede lo que su sinopsis nos ofrece. Un hombre parece reposar y disfrutar del sol y las vistas, pero segundos mas tarde nos enteramos de que el mismo está muerto. Para decirlo con exactitud, ha sido asesinado a plena luz del día con gente alrededor. 

Lo extraño es que el cuerpo presenta signos de haber muerto mucho más tiempo atrás del pensado, y que solo lo dejaron en el jardín mirando hacia el mar, con un sombrero de paja y una revista en su abdomen, y a pesar de ser un sitio concurrido, ninguno de los testigos vio el momento en el que acomodaron el cuerpo, de hecho, aseguran que él mismo llegó caminando.

Para ayudarnos a esclarecer este crimen, llega nuestra protagonista, la inspectora de Policía Cayetana, quien se encuentra con catorce sospechosos y ante la posibilidad de que un extraño haya subido exclusivamente para cometer el hecho.

 

El libro nos trae un pequeño mapa del Cortijo. Muy útil para ayudarnos a hacer nuestras propias conjeturas y poder seguir paso a paso la investigación. 

A medida que vamos leyendo, nos encontramos con personajes excéntricos y muy particulares, y  se va demostrando cómo, por casualidades de la vida, más de un desconocido pudo haberse cruzado en el camino de los demás.

Mientras avanza la investigación conocemos aspectos de la vida de nuestra inspectora y como ayudan a su trabajo diario. 

En cada capítulo leemos como Cayetana debe lidiar con verdades a medias, mentiras piadosas, rencores, callejones sin salidas, además de varios sospechosos algo alocados, estrafalarios y tétricos, quienes te divierten en ocasiones con sus ocurrencias. Donde todos parecen culpables, pero nadie lo es.

 

Sinceramente, no logré encontrar el sentido al nombre del libro hasta ya avanzada la lectura, más precisamente, sobre el final. 

¿Quieren saber si adiviné quién era el asesino? Pues les cuento que no. Todas mis flechas apuntaban a uno, pero los hechos no. Creo que era más que nada cierta aversión que nació hacia él después de lo que leí y lo que sentí mediante Cayetana. 

Debo decir que el libro te deja varias moralejas, aprendizajes, o como quieran llamarlo. O al menos, yo me voy con esta conclusión: 

•  Librarte del demonio no implica necesariamente que tus tormentos internos también se irán.
• Él que mal empieza, mal acaba. Y sino, pregúntenle al muerto.
• Las excentricidades de una persona pueden ser realmente asombrosas, y más si tiene quien las siga.
• No siempre quien ha sido débil y asediado por gente mala, busca venganza.
• La verdadera amistad es capaz de todo y mucho más.
• El amor no debe basarse solo en promesas, y más si son vacías.
• Quien hace las cosas bien, tiene su conciencia tranquila.
• Hay amores que llegan a la vejez y más si el compañerismo está presente.
• Ser jóvenes y creer tener la respuesta a todo, generalmente viene acompañado de grandes enseñanzas, muchas veces de mala o traumática manera.
• Haber tenido todo en la vida pero hacerla rutinaria, nos lleva tarde o temprano a que nuestro inconsciente nos domine y quiera recibir la adrenalina que se le privó por tanto tiempo, a costas de actos inconcebibles.

 

 

 

     

¿Por qué 4,5? 

Porque, si bien la lectura es atrapante y tiene muchas frases realmente bellas, hay muchas descripciones de ciertos lugares, que al menos para mí, sobran. Creo que a las personas que realmente tienen la posibilidad de conocer la zona, les es muy útil. Pero para quienes jamás lo vimos, no nos aporta nada.

¡Ojo, Es mi apreciación!

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