Reseña: La culpa es del escocés - Stefanía Gil

 

¡Hola, lectores! Nuevamente me tienen por aquí, esperando que se encuentren bien de salud.

La reseña que les traigo hoy es de un libro que tenía pendiente desde hace unos meses, afortunadamente se alinearon los planetas a mi favor y tuve la oportunidad de leerlo en una Lectura Conjunta Olímpica ja,ja,ja.

Es uno de los libros de la autora Stefanía Gil, «La culpa es del escocés». A continuación les dejo mi opinión sobre esta historia.

Erin quiere llegar a ser jefa de enfermeras en algún hospital, pero la vida tiene otros planes para ella.

Unos planes que están en otro país, lejos de sus amigos y de todo lo que conoce y quiere, cuidando de una mujer que poco conoce y soporta.

Cree que todo aquel cambio es un injusto castigo por estar desempleada y llevarle la contraria a su madre.

Pronto se dará cuenta de que bajo el cielo gris y lluvioso de Escocia, encuentra su lugar ideal en el mundo que le hará replantearse su propósito de vida y le inyectará ganas de quedarse en tierra extranjera en donde también encontrará, en un descuido, al chico del kilt; y este desde que la ve, sospecha que ella formará parte de su presente y su futuro, por lo que no puede ―ni quiere― dejarla escapar.

«La culpa es del escocés» cuenta la historia de Erin, una joven enfermera recién egresada a la cual se le dificulta encontrar trabajo. Ella quiere trabajar de lo que estudió por años y se lamenta día a día no obtener un puesto de trabajo en un hospital tal y como sueña. Se frustra al sentir que es una carga para su familia, y se encuentra en medio de una encrucijada cuando su madre le propone ir a cuidar a su tía abuela Isla, una señora mayor que vive sola y a la cual no le duran las enfermeras, sin embargo Erin no quiere encerrarse a cuidar una anciana.

Cuando se le acaban las posibilidades de continuar en su ciudad y a causa de un accidente, decide probar suerte en el extranjero considerando que podrá ganar experiencia desempeñándose como cuidadora de su tía abuela aunque le duela dejar atrás a sus amigos y a su familia.

Cuando llega a Escocia, lugar de residencia de su tía, espera recibir un trato serio por parte de ella pero en ningún momento imaginó que fuera tan fría y desdeñosa. Pronto Erin se da cuenta que su tía realmente no necesita acompañamiento de enfermeras pero sí apoyo en su soledad. Erin se niega a dejarse arrastrar por la amargura de su tía y decide disfrutar de los paisajes mágicos que tiene Escocia, y es en uno de esos recorridos donde se reencuentra con el chico del kilt que conoció en el avión.

Bruce quedó encantado con Erin desde la primera vez que la vio, pues ella no reaccionó como las demás mujeres cuando lo vieron en kilt y eso despertó interés en él. Decidido a no dejarla ir, le propone ser su guía turístico, y entre visitas y paseos comienza a nacer algo más que una amistad entre los dos.

Isla es una mujer que sufre en silencio a causa de una perdida. El dolor y la tristeza la convirtieron en una mujer fría, solitaria, resentida y amargada. Ve en Erin a la mujer que fue antes de la tragedia, pero no cree volver a ser feliz sin sentirse culpable. Sin embargo, con el pasar de los días y gracias a la terquedad de Erin por sacarla de ese estado de depresión, vuelve a sentirse completa y feliz.

Yo ya me veía venir los problemas.

Es más, me esperaba que explotará la bomba, después de todo una, como vieja lectora, ya espera el drama. La relación entre Erin y Bruce iba viento en popa, incluso ella ya había decido hacer de Inverness su hogar; Isla se había convertido en una ancianita buena y feliz pero cuando descubre que Bruce es familiar del culpable de la tragedia de su vida, todo lo logrado por Erin se desmorona e Isla vuelve a ser esa mujer resentida y aún más despiadada dispuesta a arruinar la vida de la pareja.

Varias veces quise meterme al libro para quitar a Erin del lado de esa mujer egoísta,   una mujer que no dejaba que nadie fuera feliz y quien a base de mentiras estaba dispuesta a dañar a los demás sin importarle quedarse sola. Es increíble cómo el dolor de la perdida puede llegar a cambiar y a envenenar tanto el corazón de una persona. Sé que muchas personas logran salir de un pozo depresivo pero no tenemos en cuenta todo lo que han perdido de ellos mismos estando ahí.

 Cuando solo veía oscuridad para Isla es el karma o tal vez el mismo destino lo que le permite darse cuenta del daño que estaba causando en los demás y en ella misma.

Una historia que deja como aprendizaje la importancia del acompañamiento a personas que han sufrido una perdida, del acompañamiento a personas que sufren depresión y el apoyo a esos miles de jóvenes que se frustran y llegan a desmotivarse por no conseguir un trabajo, lugar que muchos hemos ocupado alguna vez. Sin dudas me ha encantado y quedé con muchas ganas de recorrer esos bellos lugares que Stefanía nombra en la historia.

¡Nos leemos la próxima, Olímpicos!