Salvador e
Irene son amigos. Y si no llega a existir el WhatsApp hubieran podido seguir
siéndolo toda la vida. Hasta que una noche, él escribe: “Me encantaría hacerte
el amor”. A partir de ese momento, y aunque ambos saben que lo suyo es imposible,
se hechizarán mensaje a mensaje. Y, espiando su conversación tú también te vas
a enamorar de ellos. Una moderna historia de mensajes cortos y sentimientos
largos que te mantendrá en línea de principio al final. Porque las hormonas te
las puede alborotar cualquiera pero, en cambio las neuronas son muy pocos los
que las saben acariciar. Maldito WhatsApp. Tenía una vida antes de aquel
mensaje; pero desde que lo leí, el resto del mundo había desaparecido.
Idoia es una autora muy querida por los dioses del
Olimpo, ha sido la primera autora entrevistada en el blog y además la
primera autora que nos pidió que reseñáramos un libro suyo, si no me
equivoco. Por lo que, cuando me dijeron que me tocaba reseñar un libro de ella,
obviamente me emocioné, la reseña prometía…
Quiero empezar diciendo que nunca me he casado, no estoy
en una relación, no tengo hijos, ni mucho menos un mejor amigo. Por lo que
entre Irene y yo hay cero concordancia, quizás eso fue lo que hizo que no me agradara.
Se podría decir que al iniciar el libro, gracias a la
sinopsis, ya tienes un gran spoiler, el dichoso mensaje que lo comienza todo,
Salvador envía a Irene un whatsapp diciéndole que le encantaría hacerle el
amor, y es así de sencillo como la vida de ella da un vuelco total, así como lo
leen, por ese sencillo mensaje.
Salvador e Irene eran esos típicos niños que se pelean y
luego se vuelven mejores amigos, su amistad ha sido muy larga a través de los
años, pero nunca ha ocurrido algo entre ellos, no porque no se atraigan, no,
simplemente porque ambos quieren muy distintas cosas para su vida a futuro.
Con el paso de los años, Irene se casó, tuvo dos hijos y
luego se divorció. Mientras que Salvador dedicaba su vida a escribir grandes
libros, el alcohol y las diversas mujeres que pasaban por su cama.
Esto sólo lo sabemos gracias a los recuerdos que aflora
el mensaje de Salvador en Irene, conocemos un poco más de su historia en
conjunto, ya que al ser una historia corta no hay hojas suficientes para escribir
sobre los más de 20 años que se han conocido estos chicos.
Pero el mensaje no aflora sólo recuerdos, sino que
también sentimientos, sentimientos que Irene había, en cierta forma reprimido,
aunque ahora vuelve a recordar y a sentir lo mismo y quizá con mayor fuerza,
pese a que con el paso de los años, han ido poco a poco perdiendo el contacto.
Respecto a su historia, me gustaría haber sabido más
sobre cómo se desarrolló su amistad, porque sólo se muestra un poquito de ella,
algo que me dejó con gusto a poco. Todo gira en torno a Irene, lo que se me
hizo cansador dado a que se hacen irrelevantes los demás personajes, como que
sólo están de relleno. Sabemos todo sobre Iren, su trabajo y lo que piensa o
siente, pero no tiene mucha interacción con quienes son sus mejores amigos,
incluso con su pareja y sus hijos.
Siendo
el libro una historia corta, se me hizo más corta aún, pero eso no quiere decir
que para mí fue una lectura rápida, todo lo contrario.
Ahora hablemos de los personajes puntuales:
Irene, es una mujer de 40 años, divorciada y con dos
hijos, que tiene una relación de alrededor de un año con Mateo, es un personaje
con quien no me pude identificar en nada aparte del género, cada vez que la leía rodaba los ojos, no puedo
aún ahora, comprender su forma de actuar, es un sinsentido; se pasa el libro
entero reprochándose su actitud, pero no es capaz de cambiar, culpando a la tecnología por su
actuar, dejando de lado a gente importante y haciendo sufrir a personas por una
simple calentura. Además, spoiler (si lo quieren leer, seleccionen el siguiente
texto)
¿Cómo es posible andarse mensajeando de esa forma con un
chico, cuando por tu culpa tu pareja está en el hospital? ¿Cómo?
Que alguien me explique eso, en serio, sé que todos
cometemos errores, que somos humanos y bla bla bla, pero el actuar de Irene no
fue para nada así.
Ahora Salvador, en cierta forma me cayó mejor que Irene,
¿por qué? Pues debido a que lo sentía más concreto, sí, era un idiota de
primera, pero no se andaba con rodeos e iba al punto, algo que nuestra
protagonista no era capaz de hacer. ¡Vamos! Que tienen 40 años, ya no es tiempo
de andarse dando con vueltas, sino que hay que andar de frente.
Otro personaje que vale la pena mencionar es Mateo, la
pareja de Irene. Sinceramente, ella no se lo merecía, él es un cielo de chico,
el cual muchas sé que desearíamos tener, pero nuestra protagonista no lo
aprovecha, y aunque él no supiera lo que ella pensaba o hacía, le iba a doler,
porque NO era lindo lo que Irene hacía, aunque tratara de justificarse.
Un detalle que arreglar es la redacción y ortografía
que tiene el libro, Idoia tiene una buena pluma, como se dice en el mundo
literario, pero como soy bien quisquillosa (bien lo saben los Dioses) no pude
evitar fijarme en esos errores que, quizá, para más de uno pasó desapercibido.
Y como bien leen, no tengo mucho que decir, mucha
historia no hay, ya que a pesar de que Irene y Salvador llevan siendo mejores
amigos desde casi toda su vida, aparte del tema sexual no se comenta mucho de
lo demás, la historia en conjunto que tienen. Está Nerea, la mejor amiga de
Irene y con quien tiene una empresa, pero tampoco sabemos mucho de ella.
También está su ex marido y padre de sus dos hijos, con quién ni sé porqué se
divorció, pese a que según ella “casi ni discutían” e incluso separados se
llevan bien. El rol de madre de Irene no estuvo muy presente, debido a que está
divorciada y también a que ella en cierta forma se la pasa pensando en Salvador
ó hablando por Whatsapp con él el tiempo que está con ellos y Mateo, un chico
enternecedor, el chico bueno de la historia, pero lamentablemente hay quienes
prefieren al malo que te hace pasar malos ratos.
Ah, y se me olvidaba mencionar, la amistad es algo
sagrado, que no puedes cambiar a tu antojo por algo meramente sexual, los
amigos se valoran y se aprecian, y es por esa razón que al decir que Irene y
Salvador son “mejores amigos” uso las comillas, porque si esos son mejores
amigos, yo prefiero quedarme sola solita.
Le doy 1 de 5 Olimpos, y en cierto modo lo lamento, porque
era un libro que me tenía con mucha ilusión, pero realmente no me gustó para
nada, y al saber que tiene continuación, no me gustó aún más, hubiese preferido
que fuese sólo un libro con inicio y fin. Es triste decirlo, porque en realidad
soy muy fácil en cuánto a libros se refiere.
Y bueno, hasta aquí llegó mi reseña, de todos modos los
animo a leer ésta historia, porque sé que tanto como a mí no me gustó, puede
haber gente a la que le haya gustado. Además que Idoia ganó un premio gracias a
éste libro (I Premio de Novela Corta de
la Asociación de Escritores de Romántica). Déjenme saber sus opiniones en los
comentarios.
El libro lo pueden encontrar acá.
>ARTEMISA<
Hola!!! No conozco el libro y debe ser porque es independiente.
ResponderBorrarMuchas gracias por la reseña, debo decir que es una pena que no te gustara, siempre e tratado de apoyar los autores independientes ya que me e encontrado historias maravillosas, pero hay veces en que esos implemente no pasa no?
Soy nueva en tu blog y ya te sigo!
Te invito a pasar por mi blog también por si te animas!
Cariños!