Me
encantó volver a leer sobre David y Christopher, sus personajes son de esos que
siempre te pueden sorprender, porque cada vez dan más y más de sí mismos. Y es
que, ¿apuntar a un agente de la DEA o sobrevivir a ataques de jaguares? Esas
cosas solo son vividas por nuestra dupla investigativa.
¡Oh!
Ando muy despistada y hasta ahora me doy cuenta de que no los he saludado. ¿Qué
tal han estado Olímpicos? Yo ando un poco más liberada de cosas, pero la
neuralgia, mi fiel compañera, no me abandona. ¡Quiero que se vaya!
Como
les venía diciendo, en este libro; que es el tercero de lo que podemos decir
una serie, con sus anteriores ya reseñados “Vendetta Sangrienta” y “Natividad de Sangre” es una colaboración entre autores a los que no les notarás la
diferencia en la pluma. Me asombra la coordinación que entre ellos presentaron
para escribir de los mismos personajes y aun así estos mantuvieran su identidad
pura y fresca hasta este libro.
Le doy
gracias a Jorge del Rio, quien es el escritor de “La noche del jaguar” bajo el
sello de Arachne, por la confianza depositada en el Olimpo para reseñar sus
libros.
Nueva York, julio de 1987. Mientras la Gran Manzana
atraviesa una ola de sofocante calor, sus calles también se calientan con la
inminencia de una guerra por el control del narcotráfico, que amenaza con
teñirlas de sangre. Una sucesión de violentos crímenes que obliga al teniente
Christopher Dubois, de la brigada de Homicidios, y a su compañera la detective
Pamela Garofalo, a unir fuerzas con la D.E.A. para intentar controlar la
situación antes de que ésta se desborde. Daniel Roerich, el investigador privado,
tiene un nuevo cliente. Irena Suárez, una mujer tan enigmática como fascinante,
que le contrata para hallar a su hermano desaparecido: un hombre proveniente de
Centroamérica, envuelto en el misterio… y el peligro. ¿Cuál es la relación
entre ambos casos? ¿Qué nexo los vincula con las horrendas muertes de miembros
de la mafia neoyorquina, que parecen obra de una fiera salvaje? Un regreso al
universo de Sangre bajo la luna, creado por el maestro de la literatura
popular, Lem Ryan. Un thriller sobrenatural que continúa con la estela dejada
por «Vendetta Sangrienta» de José Antonio Herrera, «Natividad de sangre» de
Jorge R. Del Río y «No salgas de noche» de Julio M. Freixa.
En esta
oportunidad, vemos a Christopher en compañía de Pamela Garofalo, quien es la
detective que ha sido su compañera en acción en los últimos dos años, aproximadamente.
Además, el destino lo unirá nuevamente a Daniel Roerich, un investigador
privado y “amigo” con quien ha experimentado más de un encuentro sobrenatural y
quien se encuentra en un estado económico débil, debido al poco trabajo que le
llega.
Aparte
de los ya nombrados, conocemos muchos chicos que intervienen y tienen papeles
importantes, y es que no puedo decir que hay un personaje de sobra, porque
realmente no lo encontré. Tenemos a un agente de la DEA del que debo decir, me
encantó el final, fue tan perfecto, creo que llegué a sentir lo no expresado
por Pam. Nos encontramos también con más del mundo cultural que en general nos
muestran los libros. También toca el tema del vudú, sacerdotes, rituales y libros.
Debo
decir, que uno de los rituales que más me llamó la atención fue el de “zombificación”
para recibir el alma del sujeto muerto y dejarla en las manos del “amo” y es
aquí cuando debo decir que, aunque no me gusta nada que tenga que ver con zombis,
la forma en que me vendieron la idea en este libro me pareció genial, y me
quedaron ganas de leer más de ese ritual.
No sé
si recuerdan, de reseñas anteriores, que los libros tocaban el tema de la
mafia, en especial La Cosa Nostra, y es un punto que me encanta de los libros,
ya que nos muestran una realidad de la mafia italiana en Estados Unidos, que no
es solo lo que vemos en películas o series, es más allá, es la realidad entre
el cruce que ocurre entre el subsistir de la corrupción en medio del mundo de
la legalidad y la lucha contra el mal.
Me
parece genial y chistoso a la vez, el método que tiene Christopher para confiar
en sus… temores, y aunque suene extraño, es con su gastritis con lo que lo
hace, y para quienes lean o hayan leído los demás libros, podrán notarlo. Pero
me encanta poder imaginar a nuestro protagonista como un detective en forma,
experto y conocedor de lo que lo rodea y los alcances de todo ello.
En este
libro encontrarán un montón de muertes, algunas necesarias, algunas extrañas y
otras… de más. O quizá no tanto, quizá quería más sangre, y debo decir que este
libro tiene sangre en abundancia, pero últimamente, luego de leer tanto
romance, necesitaba equilibrar la balanza y este fue simplemente perfecto.
Me
gustó que, a pesar de la mezcla entre fantasía y realidad, no hay una
exageración al margen de lo posible incluso en el propio libro y universo
creado por nuestros autores, la escritura de ellos tiene una pulcritud que admiro
y aplaudo.
No me
gustó que lo acabé y me di cuenta cuando llegué al final. Si les cuento cuánto
tardé en leerlo, creo que me dirían que estoy loca, pero, sí, lo estoy un
tanto.
Me
encantó saber que los personajes seguían y habían aprendido de sus aventuras
sobrenaturales anteriores y se encontraban lo suficientemente preparados para
poder solucionar futuros inconvenientes… sobrenaturales.
Es un
libro, no, una serie, que recomiendo totalmente, y de los que, si nuestros
escritores quieren seguir escribiendo, estoy disponible para leer y reseñar
infinitamente.
Le doy
cinco búhos y es que no tengo nada en contra que decir, amé los personajes, amé
los momentos vividos por ellos, amé el karma y lo mucho que encontramos en esta
historia.
—Atenea🖤🍟.
Hola me alegra que te gustara. No logra convencerme asi que lo dejo pasar. Saludos
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