Reseña: Estrategias del destino

¡Olímpicos! Feliz sábado.

Estamos a 26 de enero, y es mi tercera reseña del año, libro número 7 leído. Quisiera decirles que llevo más, perooooooo, la neuralgia no me abandona y por más que he luchado contra la corriente, solo llevo esos.

Quiero disculparme con ustedes, por no haberles dejado esta reseña ayer, viernes, que fue cuando se realizó el especial en nuestra fan page, pero motivos fuera de mi voluntad, me llevaron a ello. No siendo más, le doy paso a este bello libro de la autora Amber Lake, bajo el sello editorial de Kiwi.

Este libro lo tenía en mi lista desde hace un par de meses, y, además, subió unos puestos luego de entrar en el tan temido bloqueo lector; pero aun así esperé para leerlo liberada de tantas cosas.

Cosa que me agradezco enormemente.

Pertenece a una trilogía con portadas ¡HERMOSISIMAS! –Que le metieron en mi lista– les dejo la sinopsis (una que no he leído) ¡Ups!

Tras el fallecimiento de su padre, su única familia, Claire descubre que está arruinada y no tiene ni el techo que la cobija. Ante su precaria situación, decide marchar a Londres para vender las pocas posesiones que le quedan y buscar un trabajo con el que mantenerse. La llegada de unos parientes, de los que desconocía su existencia y que desean hacerse cargo de ella, le supone un inesperado golpe de suerte; aunque pronto comprenderá que se ha equivocado y tiene que huir.

Julián, veterano de la guerra contra Napoleón, es un hombre marcado por su pasado y desengañado del amor, que vive aislado de la sociedad y volcado en sus experimentos agrícolas. Un problema familiar le obliga a ir a Londres, y es allí donde el destino decide unir las vidas de ambos.

Pero innumerables obstáculos y peligros les aguardan en su camino hacia la felicidad, poniendo a prueba la fuerza de sus sentimientos. ¿Lograrán superarlos?

Es el primero de la trilogía “Los Rawson”, y es un libro de esos que te lees en una sentada. Debido a que al ser una historia de Romance Histórico la trama no es pesada.

Me llevó poco menos de tres horas acabarlo y no me di cuenta en qué momento fue que llegué al final. Es una historia romántica de esas que necesitaba, de esas de época y clásicas que no se lee irreal, que son cosas que sí pudieron ocurrir y no escándalos y cosas que no sé, que quizá se leen demasiado ficticias a la época que se está relatando. Porque si bien, eso nos gusta, leerlo siempre, se vuelve tedioso.

¿Lo que me gustó?

Me gustó mucho, que a pesar de que Claire, nuestra protagonista, queda huérfana y desamparada desde inicios del libro, debido a la muerte reciente de su padre y la de su madre hace algunos años, ella sale adelante y se salva gracias a distintas personas de un destino terrible.

Eso que ella vivió, o lo que fue forzada a vivir, me dio mucho que pensar… Lo narrado y todo lo que vimos allí, sucediendo cuando se traslada a vivir con “su tía” la “amiga de su madre” quienes se “quisieron mucho” y se vieron separadas por lo ocurrido cuando ella se fugó a casarse por amor y no compromiso como así lo habían dispuesto sus familias, son cosas que me recuerdan, el hecho que muchas personas a lo largo de la historia de la humanidad, han repetido esos actuares sin importarles más que ellos mismos, y no ven lo perjudicial que es para otros.

Debo decir, que a pesar que la dichosa “tía” es una mujer cruel, una arpía propia y típica, de la aristocracia quizás, es un personaje de esos necesarios. Y bien creado. Me hubiera gustado saber más de ella y no verla como un personaje frío y calculador, ansioso de las riquezas ajenas.

Otro personaje femenino que me gustó, fuera de ellas dos, es la madre de nuestro protagonista, Julian. Es tan buena, bondadosa y llena de buenas intenciones, aunque a sus hijos esto no les pareciera, por excederse en cuidados propios de una madre.

Quedé con ganas de saber más del padre de Julian, es casi nada lo que se lee sobre él aunque lo mencionan en distintas oportunidades, y no me dejo de pensar, que si este regresase a tiempo, cosas distintas hubieran sucedido.

Julian, es un personaje que sufre un poco, y desde su inicio hasta poco más de la mitad del libro, lo que más leemos, es de él, pero me alegra decir que el destino, tiene una estrategia que le dará el amor que él merece. Puedo llegar a decir, que el karma no es siempre para mal.

¿Lo que no me gustó?

Pasé mucho del libro, queriendo leer un poco más de nuestros protagonistas:

—Como la pareja que son al final del libro. Ya que la mitad, por no decir más del libro, Amber nos cuenta dos historias que, si bien tienen un punto de unión, esperaba más.

—Lo ocurrido luego de que Julian salvara a Claire, llevándosela de donde se encontraba.

—Tampoco el no haber leído del embarazo, de ambos embarazos.

Todo ello, me llevo a sentir un final demasiado rápido para el libro en general.

¡No vi el karma!

Sí ocurre, pero no lo vi. O… ¿será que Hades y Ares me están contagiando cada vez más de su sed de sangre?

Me gusta saber que puedo leer y leeré el siguiente libro y espero pronto reseñarlo, ¡la editorial Kiwi sacará el 3er libro este 28 de enero!

Es complicado el no decir que quiero más, pero es que no puedo decirlo sabiendo que ya está el otro libro, y aunque sé que no tratará de nuestros personajes, espero poder saber de ellos, y llenar los espacios que quedaron en mí de alguna forma. ¡Lo espero firmemente!